En la localidad de Quetroco y alrededores durante estas últimas dos semanas, niños y niñas se han familiarizado con distintos aspectos de las culturas ancestrales, rescatando información de su propio entorno y contexto cotidiano en que se encuentra insertos. Motivados por sus docentes y educadora tradicional y apoyados por sus padres y apoderados, han sido participes de las actividades propuestas para la celebración de este We tripantu, que a pesar de las condiciones actuales por las que pasa el país no es menos importante de celebrar en cada uno de sus hogares.
Danza Mapuche interpretada desde su entorno diario
En la localidad de Quetroco y alrededores durante estas últimas dos semanas, niños y niñas se han familiarizado con distintos aspectos de las culturas ancestrales, rescatando información de su propio entorno y contexto cotidiano en que se encuentra insertos. Motivados por sus docentes y educadora tradicional y apoyados por sus padres y apoderados, han sido participes de las actividades propuestas para la celebración de este We tripantu, que a pesar de las condiciones actuales por las que pasa el país no es menos importante de celebrar en cada uno de sus hogares.
El We Tripantu es un día de celebración para las familias de los estudiantes y corresponde al inicio de un nuevo ciclo en que los días serán cada vez más largos, es considerado como el renacer eventual de la naturaleza tras el invierno que comienza y es desde esta perspectiva que los estudiantes de la escuela Quetroco comprenden y se interiorizan con las tradiciones y creencias ancestrales en las clases de mapudungun, las cuales a pesar de la distancia se han continuado trabajando en la medida posible, a través del aprendizaje remoto implementado por el establecimiento, debido a la contingencia actual.
Es evidente el interés y entusiasmo de los niños por saber la importancia que tienen los pueblos originarios desde sus historias, comidas, costumbres y vestimentas, así como también el poder comprender estos aspectos desde la experiencia, ya sea, en bailes, cantos, elaboración de comidas o uso de instrumentos, las cuales han sido instancias vividas en sus hogares y que les han permitido acercarse a la historia a través de todos los sentidos.
La motivación por ser parte de la recuperación de la cultura se ve reflejada en la constancia y esfuerzo que cada niño y niña ha demostrado a lo largo de estos días, siendo apoyados fundamentalmente por sus apoderados, quienes se han convertido en sus monitores y principal apoyo, y que favorablemente han presentado la disposición necesaria para desarrollar las actividades propuestas, han sido también los encargados de recibir la información e instrucciones y de enviar las evidencias del trabajo realizado por los estudiantes a las profesoras y así poder recibir la retroalimentación correspondiente en cada actividad.
Estudiantes conociendo la cultura a través de la experimentación y el conocimiento traspasado desde la familia, educadora tradicional y profesora.
Es así como los niños y niñas de la escuela Quetroco en conjunto con sus familias se han preparado para recibir este nuevo renacer de la naturaleza, conociendo cada vez más sobre su cultura a través de la experiencia, pudiendo desarrollar diversas actividades en sus hogares y siendo constantemente apoyados por la educadora tradicional y docentes.
